Planta Sagrada "San Pedro"
12 de marzo de 2013 a la(s) 6:31
Hace
mas de un año que estoy interesado en probar san pedro, compre el
producto ya seco y pulverizado en una tienda online para cuando se de el
momento hacer la toma.
La variedad que conseguí fue la peruvian tourch, esta variedad según Jonathan ott es la que tiene mas concentración de mezcalina, pero también leí que esto es muy variable, o sea que a diferencia de Trichocereus pachanoi el preuvian tourch varia mucho de acuerdo al suelo en donde esta plantado, el clima, altura, etc. Sin duda que para que sea viable una experiencia visionaria ambos tienen que tener cierta edad, por lo menos 5 años.
Hay quienes afirman que antes ya se pueden consumir, pero la verdad que por respeto al cactus hay que esperar mas, sería un horror matarlo por completo para consumirlo o comercializarlo, siempre se toman partes del mismo, es por eso que a la hora de hacer la compra el lugar tiene que ser responsable, así nos aseguramos que no se esta matando o dañando irreversiblemente este ser vivo en el proceso. Creo que sobre todo el san pedro así como el peyote son seres de enorme sabiduría y como tales no hay que usarlos a la ligera o banalmente, sino que son parte central por ejemplo de un jardín o un altar, esto no son cosas mías, simplemente salta a la vista con solo verlos. Ellos por más pequeños que sean llaman poderosamente la atención.
Mi experiencia con enteógenos no es muy basta, tengo experiencia con hongos, floripón y ayahuasca. Guiado por estas experiencias intente hacer la ceremonia en la noche, por suerte no se dio, a pesar de mis intentos siempre pasaba algo y llegaba a la conclusión de que no debía consumirlo.
Como con san pedro no hay que tener un ayuno tan prolongado como con ayahuasca, intente varias veces hacer la toma con 24 horas de ayuno, para evitar malestares.
Luego de ayunar esas 24 horas me daba cuenta que aun no estaba listo. Fueron 3 o 4 intentos en los cuales al final nunca me sentí preparado.
El lugar que tenia destinado era el fondo de mi casa, en un rincón muy especial cerca del floripón y la salvia, ya tenia leña comprada, también un circulo de piedras para el fuego, y a pesar de todo no lograba encontrar el momento.
Fue después de una clase de yoga en mi casa que me llego la idea de que el respeto por el san pedro tiene que ser igual que con la ayahuasca y que el ayuno además de ser de 24 horas tiene que estar acompañado por una dieta 2 días antes del ayuno.
Busque un día propicio y comencé la dieta (use la misma dieta que uso con la ayahuasca), al final de los dos días de dieta y en el comienzo del ayuno de 24 horas, dispuse que no tenia que ser en la noche, sino al medio día.
La verdad que ahora analizando la experiencia, me doy cuenta que esa fue lo mejor decisión.
El lugar elegido no fue el fondo sino una parte en mi casa en donde hay solamente plantas.
La bolsa de san pedro tenía 28 gramos de cactus pulverizado, al principio y por tratarse de mi primer experiencia mezcle la mitad (unos 15gramos) con yogurt de durazno. Realmente no era feo de consumir, solo que al pasar por la garganta deja un gusto muy extraño que me hizo no volver a consumir ese tipo de yogurt por todo el mes siguiente.
Luego de tomar los 15 gramos de san pedro, me senté junto a mis plantas, pasaron 10 minutos y sentí que tenía que consumir otros 15 gramos más.
Luego de tomar el yogurt con el san pedro que me quedaba en la bolsa me senté.
Pasaron 40 minutos y no sentía el más mínimo efecto, pasaron luego otros 40 minutos y lo único que sentía era ansiedad y cosquilleo estomacal, quizás causada por la expectativa.
Fue cuando decidí armarme un tabaco con “nicotina rustica” y se puede decir que ahí comencé a sentir sus efectos.
Ya cuando había fumado la mitad la percepción había cambiado y ahora todo estaba como rodeado por ondas acuáticas, todo tenia otra perspectiva, al principio estuve tirado en el piso, después de revolcarme un rato aparecieron los perros, y jugué con ellos mas de 40 minutos, al punto de llegarme a mimetizar con ellos en muchas de las poses y ruidos. También la sensación era diferente sentía el cuerpo mas agitado y me recosté un segundo.
Con los ojos cerrados comenzaron a formarse prismas de luz, formas blancas, rojas, amarillas y doradas, mientras miraba ese paisaje comencé a sacar conclusiones de mis actitudes perrunas, y fue ahí cuando comencé a sentir una voz en mis pensamientos mas profundos, la misma me daba respuestas a los cuestionamientos que me estaba haciendo pero esa voz también dejaba otras interregnotes, pero mi cuerpo estaba con bastante energía como para estar ahí acostado respondiendo preguntas.
Sentía los músculos de las piernas y brazos como listos para realizar algún tipo de labor, fue cuando vi. Que la salvia estaba mal, había algo que al mirarla no me cerraba.
Hacia poco la había cambiado de maceta, a una gran y gruesa bolsa de las que se usan como macetas. Primero le saque todas las hojas que estaban mal y luego comencé a hacerle agujeros con el dedo, con cada agujero nuevo salía un chorro de agua estancada.
Cuando termine con la salvia, seguí con los helechos, y el resto de las plantas.
Eso me tomo un buen tiempo, en el camino vi como parte del mundo que se hace visible con la ayahuasca también se hace visible con San Pedro. Solo que se muestra a mitad de camino, o sea no se ve por completo, sino que aparece la punta del iceberg.
Al sacar esta conclusión me di cuenta que tanto el san pedro como la ayahuasca abren las mismas puertas, la diferencia es la energía que te dan para cruzarla y seguir por ese camino.
Los dos tienen cosas positivas, el san pedro al dar menos energía que la ayahuasca te permite detenerte más en el viaje, te da más control sobre el mismo. También creo que es muy bueno para trabajar la tierra, te da muchas energías, una buena conexión con la naturaleza y además se puede interactuar con otras personas, haciéndoles llegar ideas o simplemente realizando tareas en grupo. Personalmente me vinieron ganas de ir a trabajar en la huerta, con las plantas, dar vuelta la tierra, regar, etc.
Lo Natural No Puede Ser Ilegal.-
La variedad que conseguí fue la peruvian tourch, esta variedad según Jonathan ott es la que tiene mas concentración de mezcalina, pero también leí que esto es muy variable, o sea que a diferencia de Trichocereus pachanoi el preuvian tourch varia mucho de acuerdo al suelo en donde esta plantado, el clima, altura, etc. Sin duda que para que sea viable una experiencia visionaria ambos tienen que tener cierta edad, por lo menos 5 años.
Hay quienes afirman que antes ya se pueden consumir, pero la verdad que por respeto al cactus hay que esperar mas, sería un horror matarlo por completo para consumirlo o comercializarlo, siempre se toman partes del mismo, es por eso que a la hora de hacer la compra el lugar tiene que ser responsable, así nos aseguramos que no se esta matando o dañando irreversiblemente este ser vivo en el proceso. Creo que sobre todo el san pedro así como el peyote son seres de enorme sabiduría y como tales no hay que usarlos a la ligera o banalmente, sino que son parte central por ejemplo de un jardín o un altar, esto no son cosas mías, simplemente salta a la vista con solo verlos. Ellos por más pequeños que sean llaman poderosamente la atención.
Mi experiencia con enteógenos no es muy basta, tengo experiencia con hongos, floripón y ayahuasca. Guiado por estas experiencias intente hacer la ceremonia en la noche, por suerte no se dio, a pesar de mis intentos siempre pasaba algo y llegaba a la conclusión de que no debía consumirlo.
Como con san pedro no hay que tener un ayuno tan prolongado como con ayahuasca, intente varias veces hacer la toma con 24 horas de ayuno, para evitar malestares.
Luego de ayunar esas 24 horas me daba cuenta que aun no estaba listo. Fueron 3 o 4 intentos en los cuales al final nunca me sentí preparado.
El lugar que tenia destinado era el fondo de mi casa, en un rincón muy especial cerca del floripón y la salvia, ya tenia leña comprada, también un circulo de piedras para el fuego, y a pesar de todo no lograba encontrar el momento.
Fue después de una clase de yoga en mi casa que me llego la idea de que el respeto por el san pedro tiene que ser igual que con la ayahuasca y que el ayuno además de ser de 24 horas tiene que estar acompañado por una dieta 2 días antes del ayuno.
Busque un día propicio y comencé la dieta (use la misma dieta que uso con la ayahuasca), al final de los dos días de dieta y en el comienzo del ayuno de 24 horas, dispuse que no tenia que ser en la noche, sino al medio día.
La verdad que ahora analizando la experiencia, me doy cuenta que esa fue lo mejor decisión.
El lugar elegido no fue el fondo sino una parte en mi casa en donde hay solamente plantas.
La bolsa de san pedro tenía 28 gramos de cactus pulverizado, al principio y por tratarse de mi primer experiencia mezcle la mitad (unos 15gramos) con yogurt de durazno. Realmente no era feo de consumir, solo que al pasar por la garganta deja un gusto muy extraño que me hizo no volver a consumir ese tipo de yogurt por todo el mes siguiente.
Luego de tomar los 15 gramos de san pedro, me senté junto a mis plantas, pasaron 10 minutos y sentí que tenía que consumir otros 15 gramos más.
Luego de tomar el yogurt con el san pedro que me quedaba en la bolsa me senté.
Pasaron 40 minutos y no sentía el más mínimo efecto, pasaron luego otros 40 minutos y lo único que sentía era ansiedad y cosquilleo estomacal, quizás causada por la expectativa.
Fue cuando decidí armarme un tabaco con “nicotina rustica” y se puede decir que ahí comencé a sentir sus efectos.
Ya cuando había fumado la mitad la percepción había cambiado y ahora todo estaba como rodeado por ondas acuáticas, todo tenia otra perspectiva, al principio estuve tirado en el piso, después de revolcarme un rato aparecieron los perros, y jugué con ellos mas de 40 minutos, al punto de llegarme a mimetizar con ellos en muchas de las poses y ruidos. También la sensación era diferente sentía el cuerpo mas agitado y me recosté un segundo.
Con los ojos cerrados comenzaron a formarse prismas de luz, formas blancas, rojas, amarillas y doradas, mientras miraba ese paisaje comencé a sacar conclusiones de mis actitudes perrunas, y fue ahí cuando comencé a sentir una voz en mis pensamientos mas profundos, la misma me daba respuestas a los cuestionamientos que me estaba haciendo pero esa voz también dejaba otras interregnotes, pero mi cuerpo estaba con bastante energía como para estar ahí acostado respondiendo preguntas.
Sentía los músculos de las piernas y brazos como listos para realizar algún tipo de labor, fue cuando vi. Que la salvia estaba mal, había algo que al mirarla no me cerraba.
Hacia poco la había cambiado de maceta, a una gran y gruesa bolsa de las que se usan como macetas. Primero le saque todas las hojas que estaban mal y luego comencé a hacerle agujeros con el dedo, con cada agujero nuevo salía un chorro de agua estancada.
Cuando termine con la salvia, seguí con los helechos, y el resto de las plantas.
Eso me tomo un buen tiempo, en el camino vi como parte del mundo que se hace visible con la ayahuasca también se hace visible con San Pedro. Solo que se muestra a mitad de camino, o sea no se ve por completo, sino que aparece la punta del iceberg.
Al sacar esta conclusión me di cuenta que tanto el san pedro como la ayahuasca abren las mismas puertas, la diferencia es la energía que te dan para cruzarla y seguir por ese camino.
Los dos tienen cosas positivas, el san pedro al dar menos energía que la ayahuasca te permite detenerte más en el viaje, te da más control sobre el mismo. También creo que es muy bueno para trabajar la tierra, te da muchas energías, una buena conexión con la naturaleza y además se puede interactuar con otras personas, haciéndoles llegar ideas o simplemente realizando tareas en grupo. Personalmente me vinieron ganas de ir a trabajar en la huerta, con las plantas, dar vuelta la tierra, regar, etc.
Lo Natural No Puede Ser Ilegal.-
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